Imagina que te invitan a un curso intensivo en el que las personas más relevantes e importantes que conoces serán tus profesores. ¿Rechazarías una oportunidad así? Yo no he podido. Imposible rechazar una invitación así.
Bueno, para ser sincero, no he sido exactamente invitado. Hemos trabajado muy duro para tener esta oportunidad. No ha sido ni barato ni fácil, pero no te puedes perder una oportunidad como esta, que sólo ocurre una vez cada dos años.
Has leído bien. No es una oportunidad «única en la vida», sino una oportunidad «única cada dos años». Como cada dos años, me encuentro con muchos de mis colegas, que también investigan sobre madera estructural. ¿Puedes imaginarte lo interesantes y excitantes que son nuestras charlas? (Algo así como Big Bang Theory, pero hablando de madera en lugar de sobre Física). Un evento así es la Conferencia Mundial de Ingeniería en Madera (World Conference on Timber Engineering). Y como puedes suponer (si su nombre no te ha impresionado lo suficiente), es algo realmente interesante y valioso, aunque de escaso (o ningún) valor en el curriculum.
En un congreso científico no sólo aprendes: también compartes. Es, ante todo, un encuentro entre iguales. Todos estamos interesados y todos somos interesantes. Todos nos escuchamos atentamente y todos tenemos algo que decir. De hecho, sólo vamos porque los demás nos van a escuchar -¡faltaría más!-. Llevamos todo nuestro saber y a cambio recibimos todavía más. Todos enseñamos. Todos aprendemos. Y si tienes dudas, siempre puedes discutirlas durante la comida con el autor en persona. Y eso, puedo asegurarlo, es una experiencia muy enriquecedora.
Conoces a gente realmente impresionante. Te sientes parte de la comunidad científica de un modo muy agradable. Al menos, mucho más que en tu vida diaria como científico: proyectos denegados, artículos a reescribir, evaluadores, revisores, editores…
Y eso es probablemente lo mejor: «Es fantástico poner por fin una cara al nombre», como me dijo un colega neozelandés cuando nos conocimos. Así de sencillo. Así de maravilloso.
